MONDO GALERIA presenta una exposición única de uno de los genios de la fotografía de todos los tiempos: MAN RAY (Estados Unidos, 1890).
Comisariada por Pierre-Yves Butzbach (Francia, 1955) y Horacio Basilicus (Italia, 1963) esta exposición inédita plantea un nuevo recorrido a través de la multifacética obra de Emmanuel Radnitsky, visionario de la fotografía como arte, miembro del grupo Dadaísta en París y luego de los Surrealistas, en la que la yuxtaposición de obras emblemáticas en diferentes medios ayudan a crear una imagen global del universo poético de este autor.
El día 9 de Mayo con mortivo de la exposición y para completar la obra multifacética de MAN RAY se proyectarán en el Auditorio del Institut français de España en Madrid las películas "Retorno a la Razón"(Retour à la raison,1923), Emak Bakia(1926), "Estrella de mar"(L'Etoile de mer, 1928), presentadas por Pierre-Yves Butzbach.
Esta proyección es posible gracias a la colaboración del 
Man Ray, reconocido como uno de los más grandes fotógrafos, ocupa un lugar prominente en la historia del arte del siglo XX. Algunas de sus fotografías se han convertido en emblemáticas e ineludibles. Visionario, él fue uno de los primeros en utilizar la fotografía no simplemente como un medio para reproducir, sino, como un verdadero medio para la creación en sí misma.
Sus aspiraciones artísticas lo llevaron a explorar las técnicas fotográficas, tanto en la toma de la imagen como en el laboratorio. Pero su trabajo no está dedicado exclusivamente a la fotografía, también es pintor, dibujante, cineasta, creador de objetos, poeta.
Participó en los movimientos de vanguardia, donde tanto los dadaístas como luego los surrealistas favorecieron esta interdisciplinariedad, al estar compuestos por artistas procedentes de todos los horizontes artísticos: escritores, poetas, pintores, escultores, músicos, actores, cineastas, fotógrafos. Todos aspirantes a una nueva concepción del arte.
Ya en Nueva York, Man Ray, el joven artista, fue interdisciplinario. A su llegada a París, acogido por los dadaístas, no puede más que unirse a ellos y participar naturalmente en esta reacción en cadena de procesos creativos experimentales e innovadores. Man Ray que siempre se había negado a ser encasillado, reivindica la fértil mezcla de formas e ideas para forjar sus creaciones artísticas, que con frecuencia desarrollará en múltiples medios y a lo largo de diferentes épocas. Man Ray no cesa de enriquecer los diversos materiales que utiliza y a su vez se enriquece con ellos. Su obras completas se presentan como un auténtico conjunto dispar habitado por un único espíritu inconfundible.
Es necesario aceptar estas variaciones para apreciar la obra del artista en toda su complejidad y comprender el proceso creativo de Man Ray y la importancia de su obra en el desarrollo del arte contemporáneo.
La exposición Man Ray “Vistas del espíritu” es una mirada retrospectiva al proceso creativo que el artista utilizó para enlazar su propia visión al objeto de creación, mediante la utilización de múltiples medios técnicos.
Gracias a una yuxtaposición de la obra fotográfica con algunos, grabados, collages, objetos, películas o libros - la exposición presenta el universo estético y conceptual de Man Ray. dividido en núcleos temáticos en los que puede apreciarse en forma directa la evolución de ideas recurrentes en el autor.
Dentro de esos núcleos cada una de las obras expuestas (new prints, copias originales, objetos y dibujos) nos ayudan a navegar a través de las ideas de un artista que supo utilizar los medios ofrecidos por cada arte para enfatizar su efecto poético.
Emmanuel Radnitsky (South Philadelphia, Pennsylvania, U.S. 1890) en 1910 conoce a Alfred Stieglitz en su famosa galería “291″ de la 5 avenida. Allí entra en contacto con la obra de importantes artistas y comienza a frecuentar los ambientes artísticos.
Tuvo su primer contacto con el Cubismo en 1913 en el Armory Show «International Exhibition of Modern Art» que tuvo lugar entre el 17 de febrero el 15 de marzo 1913, convirtiéndose en un punto de inflexión para el arte de Estados Unidos, había muchas obras impresionistas, fauvistas y cubistas.
Tuvo su primera exposición individual en 1915, año en que conoció a Marcel Duchamp, quien le animó a experimentar con otras técnicas como el collage y el ensamblaje. Creador junto a Marcel Duchamp del New York Dadá, inició su trayectoria artística como pintor. Impulsado por Duchamp, Man Ray se trasladó a
París en 1921. Se unió al Movimiento Dadá y luego a los Surrealistas. Empezó alrededor de 1921 sus trabajos en fotografía muy relacionados a los de Moholy-Nagy, ya que ambos manejaron para su elaboración, diferentes objetos tridimensionales y piezas mecánicas. Es en París donde descubre que su carrera pictórica no es tan productiva como la fotografía. Se dedica a la fotografía y ejerce como retratista de personajes relevantes del mundo del arte y la burguesía. Son retratos donde predomina la expresión personal del retratado frente a la objetividad de la imagen.
Fue ante todo un fotógrafo de estudio, de taller, para el que la manipulación en el laboratorio, el reencuadre, la ampliación o el retoque eran elementos esenciales. Su interés principal se dirigió hacia la ampliación del mundo visible. Para Man Ray: “el fotógrafo es un explorador maravilloso de los aspectos que nuestra retina no registra nunca. (…) He tratado de plasmar las visiones que el crepúsculo, la luz demasiado viva, su fugacidad o la lentitud de nuestro aparato ocular sustraen a nuestros sentidos”.
Muere en Paris en 1976, su última mujer Juliet Browner a quien conoció en Los Ángeles al volver de París debido a la Segunda Guerra Mundial, crea inmediatamente la MAN RAY Trust, en colaboración con la cual se realiza esta exposición.
